18 may 2013
2:40
Salí al parque y sentado vi cómo un insecto cayó de la rama del árbol a mi pantaloneta. Creí ver que había caido de lado, en todo caso así permaneció un momento, moviendo mucho las patas, o algunas patas. Las movía muy rápido, el insecto estaba en shock. Sentí su miedo. Me pareció que era importante que recuperara el equilibrio después de la caida así que lo paré. Así erguido se sacudió un momento y desvié la mirada. Me quedé un rato en una vecina que fue a insistirle a su perro que regresara a casa. Era una señora, madura, pero las nalgas estaban bien. El bichito seguía parado, pero ahora recogido en su caparazón. Lo volteé hacia un costado y sólo movía dos patas, luego se encogió y dejó de moverse.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario